El Jueves día 2 de Febrero, gracias a la tribu de los profes 2.0 y a Olga Catasus que me invitó, tuve la oportunidad de asistir al preestreno de Katmandú: un espejo en el cielo.
El preestreno en Cartagena fue todo un éxito. Profes, padres y alumnos abarrotamos los cines. Palomitas en mano nos dispusimos a adentrarnos en el mundo de Katmandú.
La película se inspira en el libro "Una maestra en Katmandú" que relata la historia de una española que viaja a Nepal para adentrarse en la cultura y en la ayuda a los demás, concretamente colaborando para que los niños más desfavorecidos puedan recibir una educación creando una escuela.
La historia de una persona que entrega su vida a los demás siempre es conmovedora, pero cuando esta persona lo hace desde la fe en que la educación cambia vidas y proporciona oportunidades ya es algo increíble.
No voy a relatar la película porque creo que es importante que cada uno pueda contemplarla sin saber lo que sucede previamente. Pero sí quiero destacar algunas partes de la película. Por un lado me resultó muy interesante cuando las cosas van mal y la protagonista está desesperada, entonces alguien le dice que lo abandone, que no es para tanto, ella hace la reflexión "la educación cambió vidas, de hecho cambió la mía". Esa firme creencia de la educación nos ofrece un mundo más justo e iguala oportunidades es algo que hoy en día hemos perdido un poco y yo creo que es algo esencial en nuestro mundo.
Otro de los aspectos que me interesó mucho sucede cuando nuestra protagonista está intentando crear una escuela y reflexiona sobre cómo los políticos no la comprenden. Ella destaca que quiere una escuela de calidad y la administración sin embargo lo que parece querer es una escuela de cantidad. En el fondo de esta cuestión está la importancia de cómo hay que concebir la escuela y me recuerda a la frase de Martínez Bonafé, cuando dice "una cosa es clientelismo y otra la participación en una escuela de calidad".
Desde el primer minuto el espectador queda involucrado y fascinado por la historia de la película. Nos presenta una realidad que debemos conocer, por la que debemos luchar. Y todo a través de los ojos de una maestra que pretende cambiar el mundo con una única arma: la educación.
¿Algo malo de la película? quizás el doblaje, que en algunos puntos de la película se nota demasiado. Aún así esto no es negativo para mí, sino motivador, porque estoy deseando ver la película sin doblar para captar aún mejor su esencia.
Agradecer enormemente a todos los que han posibilitado que esta IV Noche de Cine y Educacion sea posible. Aquí está el enlace al blog de la experiencia, en el que podéis participar y consultar, entre otras cosas, la fantástica guía didáctica de la película.
En cuanto tenga la oportunidad trabajaré esta película con mis alumnos de magisterio. Creo que hay valores universales respecto a lo que representa la educación que no debemos olvidar.
Si algo nos enseña esta película es que debemos buscar cuál es nuestro espejo en el cielo. ¿Cuál es el tuyo?
3 comentarios:
Nuestro agradecimiento a tí y te esperamos con alumnos que llenen de frescura y buen hacer el proyecto de Cine y educación ¡a por los GOYA!
Un abrazo
Doña Díriga @londones
Tenía previsto haber ido a verla este fin de semana, pero, por diversas circunstancias, no ha podido ser (espero que pueda ser, en todo caso, pronto…). De la sensibilidad y buena mano de Iciar Bollaín a la hora de abordar temas de profundo calado humano, María del Mar, siempre cabe esperar un buen resultado en pantalla (aunque la anterior, También la lluvia, no me terminó de convencer, pese a su magnífico arranque y buena hechura). Ya veremos y contaremos.
Un abrazo y buena semana.
Gracias a ti Mar por tu asistencia y por esta entrada con la que das visiblidad a un proyecto que consideramos muy interesante para educar en las TIC, la comunicación y el mundo audiovisual desde las vertientes de consumidores y creadores críticos y reflexivos.
Publicar un comentario